Con el lanzamiento de la quinta generación en el año 2005, BMW lleva al mercado un Serie 3 de fuerte carácter que transmitía más fuerza y presencia que su predecesor. Y tuvo premio, el Car of the Year que le dieron en Nueva York. En proporciones sólo supuso una pequeña progresión comparado con la cuarta generación: Ahora la parrilla de doble riñón y los faros circulares, dobles y cubiertos, van levemente curvados en la parte superior.

Combina potentes motores y el clásico placer de conducir de BMW con la economía de combustible y las bajas emisiones. Para reducir el peso, BMW utilizó un cárter de aluminio y otros componentes en magnesio-aluminio. Se incluye ya la regeneración de energía de frenado y los modelos de cuatro cilindros equipan la función Stop&Start.

Fue Coche del año 2011 en coches.com. Luego, la sexta generación del BMW Serie 3 reinterpretó los rasgos de diseño clásicos y se aprecia la reminiscencia de los modelos de los años 60, como la gran calandra que integraba a la perfección las luces y la parrilla de doble riñón, y que caracterizaban al primer BMW Serie 3 de 1975.

Eso sí, ahora las ópticas circulares dobles tienen «cejas» LED integradas y el capó una fuerza inusual. La aerodinámica es excelente (0,26 de coeficiente aerodinámico) gracias a la Air curtain (cortina de aire) que se crea en las inmediacciones de las ruedas delanteras y que consigue que se reduzca el consumo a altas velocidades.

Ya habíamos hablado de todas las novedades mecánicas y técnicas. Por dentro es mucho más espacioso ya que es más largo (ahora casi llega a los 4,6 metros) y la distancia entre ejes también aumentó en cinco centímetros. En 2015 el coche vivió una actualización estética y tecnológica.